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«Liderar también es transformar sin perder el propósito». Con estas palabras, Gabriel Escarrer, presidente y consejero delegado de Meliá Hotels International, resumió el espíritu que ha guiado su trayectoria al frente del grupo hotelero, al recibir ayer el Premio Esade 2025 durante la XXIX Jornada Anual Esade Alumni, celebrada en el Palau de Congressos de Catalunya bajo el lema From Legacy to Leadership. Este reconocimiento, impulsado por la comunidad de antiguos alumnos de Esade, destaca su liderazgo ético, innovador y comprometido, así como su capacidad para modernizar una empresa familiar sin perder la esencia ni el impacto positivo en la sociedad.
En su intervención, Escarrer destacó que el 80 % del crecimiento previsto para Meliá en la próxima década se centrará en el turismo de vacaciones, con una presencia estratégica en el denominado «eje vacacional», que abarca desde el Caribe hasta el sudeste asiático, pasando por el Mediterráneo, Oriente Medio y el África oriental. «La expansión internacional está en el ADN de Meliá. Tras consolidarnos en las Baleares, en las Canarias y en la costa española, mi padre apostó por abrir nuestro primer hotel internacional en Bali. Esa experiencia cambió nuestra visión del turismo: aprendimos que es posible crecer de manera respetuosa, positiva y sostenible», afirmó.
Durante una conversación con María José Parada, profesora del Departamento de Dirección General y Estrategia de Esade y experta en empresa familiar, Escarrer resaltó el legado de su padre y los valores que siguen inspirando la cultura corporativa: «vocación de servicio, excelencia, innovación, coherencia y cercanía».
“Mi padre solía decir: «Las grandes familias hacen grandes empresas y las grandes empresas hacen grandes familias». Y es verdad. Estos valores nos han unido como familia y nos han fortalecido como empresa ante las dos mayores crisis del sector: la financiera de 2008 y la pandemia de la COVID-19″, recordó.
Desde hace casi tres décadas, Meliá combina su carácter familiar con su condición de empresa cotizada, manteniendo un modelo de gobernanza sólido. El consejo de administración de la compañía cuenta con un 50 % de consejeros independientes, y solo Gabriel y su hermana Mercedes forman parte de la familia en el órgano directivo. «Combinamos lo mejor de los dos mundos: la visión a largo plazo y los valores familiares, con el rigor y la transparencia que exige el mercado», afirmó.
En cuanto a los retos, Escarrer subrayó la importancia de preservar el legado familiar y de continuar generando riqueza y bienestar a través del turismo. También destacó el talento como uno de los desafíos más urgentes del sector: «Mi padre lo entendió hace décadas y hoy sigue siendo cierto: nuestro principal activo son las personas».
Ha concluido su discurso de agradecimiento con un mensaje inspirador para las nuevas generaciones: «El mejor consejo que doy a mis hijos –y a quien me lo pida– es este: la mejor inversión es la que haces en ti mismo, en tu formación y en desarrollar habilidades reales y adaptadas al mundo que viene».
La XXIX Jornada Anual Esade Alumni fue inaugurada por Patricia Valentí, directora de Esade Alumni, y contó con un diálogo sobre el futuro de Esade y su comunidad a cargo de Daniel Sanchez, presidente de Esade Alumni, y Daniel Traça, director general de Esade. En el bloque temático sobre empresa familiar, el profesor Dimo Ringov abordó el reto de la internacionalización de las organizaciones, y le siguió una mesa redonda moderada por el propio Daniel Sánchez, en la cual participaron María José Parada, profesora de Esade, y Gabriel Escarrer.
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