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Catalonia Mirador des Port reabre como cuatro estrellas tras ser reformado

El hotel menorquín ha sido reformado con una inversión de 12 millones de euros apostando por la sostenibilidad.

El hotel Catalonia Mirador des Port reabre tras la reforma de sus instalaciones y la ampliación del hotel. Las actuaciones, además de mejorar y ampliar las instalaciones, han incorporado una óptica sostenible que le ha valido el reconocimiento en los premios Re Think Hotel por su destacada contribución al cambio de paradigma en el sector hotelero aportando soluciones sostenibles.

Situado en la capital menorquina de Mahón, en las paradisíacas Islas Baleares, a tan solo 10 minutos a pie del centro, se encuentra el Catalonia Mirador des Port que disfruta de unas vistas espectaculares sobre la bahía de Mahón. El hotel, tras su reforma, suma una estrella a su categoría y pasa a tener cuatro estrellas, 119 habitaciones, restaurante gastronómico Eboca, jardín con piscina, spa, gimnasio, parking subterráneo con carga para vehículos eléctricos.

La ambiciosa reforma ha optimizado la sostenibilidad del edificio, renovando las habitaciones ya existentes y reformando las instalaciones, bar, restaurante y recepción.

Construcción de un nuevo edificio

Además, se ha construido un nuevo edificio que ha incorporado 54 habitaciones nuevas, cuatro de ellas adaptadas para personas con movilidad reducida, tres suites (una de ellas con piscina privada), completo spa, parking subterráneo con carga para vehículos eléctricos y una sala de reuniones polivalente. El hotel cuenta además con un food truck con cócteles, refrescos y snacks en la piscina y una nueva zona de juegos infantiles.

Se han invertido cerca de 12 millones de euros y se ha duplicado la plantilla para dar un servicio de calidad acorde a su nueva categoría.

Alta gastronomía con las mejores vistas

Con unas impresionantes vistas sobre el puerto de Maó y una propuesta gastronómica basada en la cocina mediterránea y menorquina, se presenta el nuevo restaurante Mirador des Port. Un espacio que cuenta con una zona de restaurante interior y una terraza para disfrutar de las cálidas noches en la isla. Ofrece una completa carta con productos locales como protagonistas en platos tan inspiradores como las berenjenas a la menorquina, las croquetas de sobrasada, el solomillo de vaca vermella o la langosta autóctona. La fusión oriental también tiene cabida, con platos como el mochi de sobrasada o el calamar de playa en tempura con mayonesa kimchi. Un restaurante que abre los siete días de la semana con una amplia selección de vinos, algunos de ellos locales, así como cavas y champagnes.

Un proyecto sostenible

El proyecto tenía el objetivo de hacer el hotel más respetuoso con su entorno, siguiendo la apuesta de la cadena por la sostenibilidad, partiendo de la visión de que la actividad turística puede generar puestos de trabajo y riqueza en su entorno y tener el mínimo impacto posible en su medioambiente.

Entre las actualizaciones que se han realizado para reducir la huella de carbono, se encuentra la sustitución de un sistema tradicional de calderas por uno de aerotermia con bombas de calor para el agua caliente sanitaria y la calefacción, así como iluminación led. Para reducir el impacto térmico y mejorar la eficiencia, se han instalado ventanas con el máximo aislamiento térmico y filtro solar. Climatización VRV con recuperación de calor y un sistema BMS de gestión. El hotel cuenta con una planta de energía fotovoltaica de 18,6 kW. Además, se incorporan cuatro cargadores semirápidos de vehículos eléctricos y parking de bicicletas, fomentando la movilidad sostenible.

Para reducir el consumo de agua, el jardín dispone de una amplia zona ajardinada con plantas autóctonas y césped de bajo consumo con riego automático por goteo nutrido por un depósito de aguas pluviales que reutiliza el agua sobrante del spa tras ser tratada. Las aguas “grises” de duchas y lavamanos son tratadas, filtradas y reutilizadas en las cisternas de WC. El hotel continuará sensibilizando a clientes, trabajadores y colaboradores en la importancia de reducir el consumo de agua. Además, se ha implementado un sistema de reducción de residuos, especialmente de plásticos desechables, reducción del desperdicio alimentario y el fomento del consumo de productos de proximidad, todo ello con la ayuda del personal y los colaboradores, que han sido formados y sensibilizados.

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