Grandvalira ha cerrado el periodo vacacional de Navidad con unos grandes resultados de afluencia. Del 24 de diciembre de 2013 al 6 de enero de 2014, 238.000 esquiadores pasaron por la estación andorrana. Esta cifra supone un incremento del 9% respecto a las Navidades pasadas. Además, el día 29 de diciembre se registró el récord histórico de asistencia a Grandvalira, con 26.430 visitantes.
A pesar de esta masiva respuesta por parte de los aficionados a los deportes de invierno, la estación no sufrió grandes aglomeraciones. No en vano, la estación más grande del sur de Europa ha tenido abierto estos días prácticamente el 100% de la superficie esquiable, con 110 pistas y un total de 200 kilómetros disponibles.
Asimismo, las fuertes inversiones realizadas en infraestructuras estos últimos años han permitido garantizar una excelente movilidad de los usuarios, gracias a unos remontes con capacidad para transportar a más de 100.000 esquiadores a la hora. Este hecho, junto a la fuerte inversión en restauración, han permitido seguir manteniendo una valoración de satisfacción por parte de los clientes de Grandvalira por encima del 8 sobre 10, según el último estudio facilitado por la empresa de investigación de mercados Hamilton.
El origen de los visitantes que ha recibido la estación estos días de Navidad se ha centrado principalmente en el mercado español -en el que destacan en especial los provenientes de Cataluña, Madrid y Valencia-, francés y ruso. Estos dos últimos, así como el británico, han experimentado un ligero crecimiento que certifica la cada vez mayor internacionalización del dominio.
Las excelentes condiciones de la nieve ha sido otro de los factores que ha animado a los esquiadores a acercarse a Grandvalira estas fiestas. La cantidad y la calidad de la nieve acumulada se ha visto reforzada además con las nevadas de los últimos días, que han dejado unas cotas de hasta 170 centímetros en muchas zonas de la estación.
Durante estas fiestas de Navidad y en general en el inicio de esta temporada 2013-2014, destaca también la consolidación de la apuesta après ski de Grandvalira, con numerosos conciertos y actuaciones en las terrazas de locales como Gall de Bosc o el Cala Bassa Beach Club, así como el éxito de las fiestas de L’Abarset, con afluencias por encima de las 1.000 personas y la presencia de artistas de la talla de Miqui Puig. Además, la oferta para las familias y los más pequeños ha sido igualmente amplia, con animación en los circuitos infantiles o eventos como la llegada de los Reyes Magos y la tradicional bajada de antorchas.
