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Grandvalira cerró el lunes la mejor Semana Santa de los últimos cinco años, con un total de 199.551 días de esquí en el periodo comprendido entre el 19 y el 28 de marzo. En comparación con la temporada pasada, el dominio andorrano ha visto incrementar el número de días de esquí en 63.131, lo que representa un 46,27% más que en 2015. La media de esquiadores de estos 10 días ha sido de 20.000 por día, 6.000 más respecto a la temporada pasada. Esta buena afluencia ha venido dada, en parte, al clima soleado que ha acompañado a los visitantes durante su estancia, así como al calendario festivo de este año que ha permitido celebrar la Semana Santa más avanzada del último lustro. Los días de más actividad en pistas han sido el viernes 26 y el sábado 27 de marzo.
Respecto al origen de los esquiadores que han decidido pasar estos días en la estación más grande del sur de Europa, la mayoría provienen de los mercados de proximidad de Cataluña, resto de España, Francia y Portugal.
