Gastronomía

Mallorca disfruta por primera vez de la cocina de Albert Adrià

Durante su estancia en elBulli o ya como gestor del grupo elBarri, Albert Adrià ha cocinado en casi todas las latitudes peninsulares, europeas y mundiales. En casi todas; faltaba Mallorca. El chef de Tickets se sacará la espina el próximo martes 28 de mayo en una cena única elaborada junto al chef local y estrella Michelin Andreu Genestra. Será en el restaurante Bala Roja que el mallorquín asesora en el hotel Es Príncep de Palma (miembro de The Leading Hotels of the World), sinónimo del lujo en la bahía de la capital mallorquina.

La excepcionalidad de la velada, auspiciada por la cerveza Rosa Blanca, en su categoría hoppy lager, ahondará en una minuta que ambos chefs han erigido con históricos de su biografía y últimas creaciones adaptadas, consiguiendo un hilo argumental de mediterraneidad. La cena, para 60 personas, empezará en la terraza del local, donde los asistentes maridarán cerca de una quincena de aperitivos de ambos chefs con la vista en el espectáculo del atardecer balear.

Entre las propuestas de snack, se degustarán históricos de Tickets como la oliva esferificada, el espárrago tronco, el niguiri de caballa o la airbaguette de jamón, además de la Rosa de Tickets, aquí versionada con los aromas de la cerveza Rosa Blanca. Genestra, por su parte, aportará al inicio bucólico del menú su mejillón en escabeche de laurel, el puerro de gamba, el calamar de azafrán o la espardenya de porc negre.

Seguidamente, los invitados pasarán al salón principal del hotel para maridar los platos fuertes. Un mar y montaña global con nuevas propuestas de Adrià en Tickets como la pizza de aguacate con cangrejo real, o la carrillera de atún y cerezas y el pichón Miró de Genestra. Los postres también dialogarán: sésamo, albaricoque y alcaravea, de Genestra, y el helado de sobrasada y miel, del catalán.

Los petit fours marcarán el final del menú, la primera ocasión culinaria de Albert Adrià en Mallorca. Un viaje gastronómico único y exclusivo que sumará el saber hacer de cinco estrellas Michelin, cuatro del catalán y una del mallorquín, en un entorno excepcional con sabor mediterráneo.