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Paradores inaugura su nuevo establecimiento en Lorca con la presencia de la reina Sofía

La reina Sofía ha inaugurado el nuevo Parador Castillo de Lorca en un acto en el que también han participado el ministro de Industria, Comercio y Turismo, José Manuel Soria; el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel; la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Borrego; el alcalde de la localidad, Francisco Jódar; y la presidenta de Paradores de Turismo, Ángeles Alarcó.

La reina Doña Sofía ha inaugurado esta mañana el nuevo Parador Castillo de Lorca en un acto oficial en el que también han participado el ministro de Industria, Comercio y Turismo, José Manuel Soria; el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel; la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Borrego; el alcalde de la localidad, Francisco Jódar, y la presidenta de Paradores de Turismo, Ángeles Alarcó. Desde hoy la Región de Murcia cuenta con un Parador de Turismo más (son dos con el de Puerto Lumbreras) que, al igual que sucede con los otros 93 de la red hotelera, será fuente de riqueza y empleo para toda la comarca. El nuevo edificio, de 13.625 metros cuadrados, contribuirá a la recuperación global de Lorca después de que se haya cumplido el primer aniversario de los terremotos que sacudieron la ciudad el 11 de mayo de 2011.
El Parador Castillo de Lorca es un cuatro estrellas que se ubica sobre la ciudad, gozando de una privilegiada situación por encontrarse dentro de uno de los lugares más significativos del entorno del que toma su nombre: el Castillo de Lorca. Debido a su altura, ofrece al visitante exquisitas vistas sobre la localidad y la oportunidad de alojarse junto a un espacio histórico de incalculable valor.
De nueva planta pero perfectamente integrado en su derredor monumental y natural, la obra desarrollada por la empresa Asignia Infraestructuras ha contribuido a la localización y posterior restauración de importantes restos arqueológicos de las épocas islámica, judía y cristiana. Los restos fueron encontrados durante los trabajos de edificación, y han sido restaurados y conservados siguiendos las directrices y en colaboración con la Dirección General de Cultura del Gobierno regional. Parte de los hallazgos están integrados en el inmueble, quedando la otra en su entorno inmediato. El más importante de ellos es una sinagoga del siglo XV que queda situada dentro del Parador y que, sin haber sido profanada por ninguna otra religión, puede ser visitada por el público. Sobre sus muros y sin apoyarse en ellos se han recreado en madera los faltantes de muros y cubiertas, colgados de la estructura de acero que la cubre y la protege de las inclemencias del tiempo. Entre los descubrimientos destacan, además, las casas judías denominadas VI y VII, un aljibe islámico utilizado como polvorín en el siglo XIX una muralla almohade del siglo XIII y diferentes restos de construcciones islámicos-califales de los siglos X al XI.
Una de las actuaciones realizadas en el parador ha sido convertir la fachada del edificio en antisísmica. Para ello, se han integrado en ella diversas bandas horizontales de acero corten, que, ancladas a la estructura del edificio, evitan que éste se vuelque al exterior en caso de seísmo. El material es, además, medioambientalmente respetuoso, ya que, debido a su composición química, mantiene sus propiedades con un nivel de óxido estable que lo protege de la corrosión atmosférica.

Una inversión de 2,4 millones de euros
La inversión se completa con la aportación de 2,4 millones de euros por parte de Paradores de Turismo en concepto de decoración, mobiliario, equipamiento y obras complementarias. Actualmente, cuenta con 65 habitaciones dobles, nueve suites con salón y dos más adaptadas para minusválidos.
Además, el establecimiento posee varios salones multifuncionales y panelables destinados al turismo congresual y las celebraciones de carácter social. Se trata de un salón comedor de 375 metros cuadrados con acceso directo a la terraza exterior (también de 375 metros cuadrados) y vistas sobre los restos arqueológicos del castillo, así como de una sala de convenciones y eventos de 553 metros cuadrados divisible en tres espacios. Existen también otros dos salones polivalentes de cerca de 100 metros cuadrados cada uno.
Estos espacios se complementan con un restaurante, una cafetería o un salón para clientes, así como varias instalaciones para el deporte y el relax. En ellos encontramos una piscina interior cubierta con vistas sobre la ciudad de Lorca y otra lúdica ubicada en la zona del spa. Esta última consta de tres vasos ovalados con circuitos independientes entre sí: uno con hidromasaje, cascada de agua y estaciones de masaje; otro con agua caliente, y el último con agua fría. Completan el lugar distintas cabinas de talasoterapia y varias de masajes.
Situado a continuación de la sinagoga y la llamada casa VII se encuentra el aparcamiento, un espacio con capacidad para 68 vehículos que sirve de cubierta para los restos arqueológicos de la judería gracias a su estructura volada de pilares y vigas de acero.