Destinos

Roses acondiciona 11.000 metros cuadrados de playas para este verano

Adentrarse en el territorio ampurdanés de Roses significa descubrir un paraje natural único salpicado de montañas, senderos, caminos y rincones marcados por la historia que convierten a este destino en un lugar fascinante, en el que la belleza y la magia del entorno conmueven a cualquier visitante. Durante estos días se desarrollan en Roses los trabajos de adecuación y puesta a punto dos de sus playas, La Punta y La Nova.

Las condiciones meteorológicas y los temporales de Levante producen en Roses que la arena de las playas de La Punta y La Nova se desplace en paralelo a la línea de mar. Ante esta situación, el Ayuntamiento actúa cada año para recuperar el ancho de estos dos espacios del frente marítimo de la población. Dos nuevos litorales se unen así a los encantos que desprenden otras playas El Bonifaci, Cala Calís, Montjoi, La Pelosa o Rustella y que, con su belleza natural y salvaje, atraen a cientos de turistas cada año.

La particularidad de este proyecto es que se trata de superficies de arena que desaparecen durante la mayor parte del año con motivo de las dinámicas marinas y los temporales. En este sentido, los trabajos de recuperación que se están llevando a cabo acondicionarán un espacio con un total de 11.000 m² y dos kilómetros de longitud.

Como buena villa marinera, Roses ofrece un paisaje lleno de contrastes y acantilados, calas de arena fina y aguas poco profundas ideales para la práctica de deportes náuticos. La Playa La Punta comprende desde el puerto deportivo hasta la Riera Ginjolers y está certificada ambientalmente según el reglamento europeo EMAS y la normativa internacional ISO 14.001. Con una calidad de las aguas muy buena, este espacio es perfecto para disfrutarlo en familia.

El otro de los vértices es Playa La Nova que arranca desde la Riera hasta el Rec d’en Forquilla. Posee el certificado que atestigua la excelente naturaleza de sus aguas y contiguas a ellas el viajero encontrará vistas a la Bahía de Roses, considerada una de las más bonitas del mundo.

Además, y con el objetivo de la preservación del entorno, se han instalado en las playas urbanas pantallas protectoras que actúan contra la erosión eólica y con las que se minimizan los desplazamientos y la pérdida de arena, producidas por los efectos del viento. Esta medida, activa desde 2006, se enmarca dentro del programa de conservación del municipio promovido por el Ayuntamiento de Roses.